Ensayo: Seguridad Social.- Hector Daniel Angulo Olvera

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La Seguridad Social En México

 

 

Angulo Olvera Héctor Daniel.

30 de mayo del 2016.

Universidad Nacional Autónoma de México.

 

La Seguridad Social es el conjunto de medidas que la sociedad proporciona a sus integrantes con la finalidad de evitar desequilibrios económicos y sociales. Existe un consenso internacional respecto a la consideración de la seguridad social como un derecho humano inalienable,[1] la seguridad social mencionada como un derecho establecido en la Declaración Universal de Derechos Humanos encuentra su validez en el Artículo 22 expresando que:

“Toda persona, como miembro de la sociedad, tiene derecho a la seguridad social, y a obtener, mediante el esfuerzo nacional y la cooperación internacional, habida cuenta de la organización y los recursos de cada Estado, la satisfacción de los derechos económicos, sociales y culturales, indispensables a su dignidad y al libre desarrollo de su personalidad.”

En México el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se dedica a brindar servicios de salud, seguridad social y prestaciones económicas. Encuentra su fundamento en el Artículo 4, párrafo cuarto de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos estableciendo que: “toda persona tiene derecho a la protección de la salud. La Ley definirá las bases y modalidades para el acceso a los servicios de salud y establecerá la concurrencia de la Federación y las entidades federativas en materia de salubridad general, conforme a lo que dispone la fracción XVI del artículo 73 de esta Constitución, instituido en  el año de1943 durante la administración de Manuel Ávila Camacho.

Es la institución con mayor presencia en la atención a la salud y en la protección social de los mexicanos desde su fundación. La primera Ley del Seguro Social confirmó la responsabilidad del Estado de garantizar la Seguridad Social a los trabajadores de la relación formal laboral a través del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y a los funcionarios.[2] Su organización y administración está a cargo de un organismo público descentralizado con personalidad jurídica y patrimonio propios, con organización operativa tripartita, en razón de que a la misma concurren los sectores público, social y privado, el cuál también tiene el carácter de organismo fiscal autónomo.[3]

La Seguridad Social cubierta por el IMSS se hace deficiente e insuficiente no por la redacción de la ley que establece su fundamento sino a la mala administración, a su pésima forma de trabajo y a la falta de información a las personas que hacemos uso de estos servicios; existe una confusión entre el Seguro Social (trabajador) y  Seguro Popular.

El Seguro Popular encuentra su origen gracias a la Secretaría de Salud, creado por el Jefe de Gobierno del Distrito Federal (hoy Ciudad de México) Andrés Manuel López Obrador – en el año dos mil – pretende ser gratuito y proteger a las personas que carecen de un registro en alguna de la instituciones (IMSS, ISSSTE, PEMEX, SEDENA, etc.) que brindan Seguridad Social a sus trabajadores y familiares, se busca que con una mayor protección en salud las familias mexicanas gasten menos dinero propio en el tratamiento de sus enfermedades y, de esta manera, combatir paralelamente la pobreza.

La estrategia con la que el Seguro Popular es presupuesto de la federación pero se convierte en  oneroso en el momento en que no se comprueba la afiliación de la persona que lo solicita,  se mantiene movilizando fondos federales y así la población paga una proporción de la prima de acuerdo a su ingreso mensual – a través de estudios socioeconómicos realizados por personal de Trabajo Social en cada una de las unidades de la Secretaría de Salud- el resto es subsidiado por fondos públicos.

El Seguro Popular está creado para las personas más vulnerables, y que no cuentan con un número de registro que los haga acreedores a un servicio por las instituciones de Seguridad Social, lo único que se está haciendo es hacerlos más pobres además de ser timados.

Las zonas vulnerables en la República Mexicana no sólo se encuentran en comunidades aisladas (grupos indígenas) sino también cerca, muy cerca, de las grandes ciudades. El Seguro Popular tiene una red de hospitales en cada estado más los Centros de Salud, dependientes de la Secretaría de Salud estatal.[4] ¿Cuál es el problema con esto? que las personas que hacen uso de las instalaciones que nos brinda el gobierno entidades como Sector Salud no son las adecuadas pues de cierta manera si las personas acuden al IMSS, ISSSTE, PEMEX, SEDENA, etc., es factible que se les solicite una cuota por la atención médica, sobre todo en los servicios de urgencias y es probable que se les pidan documentos que acrediten su afiliación, al no presentarlos decidirán acudir a algún hospital que forme parte del Seguro Social y su Seguro Popular no servirá y es ahí, per sé, en donde su intento por democratizar la salud, su utopía social se ve modificada. La cuota cobrada por el servicio prestado y los cauces legales que ellos pagaron se desperdician ¿qué sucede en los casos en que el Centro de Salud no tiene los recursos para solucionar los problemas? esto es común  y lo que se les sugiere a los familiares y enfermos es acudir al hospital más cercano para su atención en urgencias o consulta programada.

De acuerdo con cifras  del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en este país habitan 112 millones 336 mil 538  personas, pero según datos del Consejo Nacional de Evaluación Política de Desarrollo Social (Coneval), casi la mitad de este total son pobres (55.3 millones), lo que significaría que apenas la mitad de la población (una quinta parte de la población mexicana aproximadamente) puede comprar un medicamento de patente y cubrir los gastos ocasionados por alguna enfermedad.[5]

El Presupuesto de Egresos  para el año 2016 aprobó un gasto de 229 mil 916 millones de pesos para el ISSSTE y 544 mil 321 millones para el IMSS, mientras que el total de gasto para el sector salud fue de 132 mil 216 millones de pesos, 2 mil millones de pesos menos respecto a los asignados en 2015 para este último sector.

La gratuidad para el sector salud a sus gobernados no existe por ningún lado pues en la Ley del Seguro Social en su artículo 251 fracción XXXVI se establece que “el Instituto Mexicano del Seguro Social debe prestar servicios a quienes no sean sus derechohabientes, a título oneroso, a efecto de utilizar de manera eficiente su capacidad instalada y coadyuvar al financiamiento de su operación y mantenimiento, siempre que ello no represente menoscabo en la calidad y calidez del servicio que debe prestar a sus derechohabientes.”[6]

Por tanto sustento la postura que: a) no hay gratuidad en el Sector Salud, b) el pueblo mexicano sigue siendo engañado por sus gobernantes, c) que el Sector Salud se encuentra sobrepasado en su población enferma, d) no es suficiente el presupuesto otorgado anualmente, e) los Sindicatos del Sector Salud no aportan el comportamiento adecuado del trabajador para sus labores y la gente que solicita el servicio.

Ningún trabajador es responsable de no hacer su trabajo por falta de material, la falta de material encuentra su realidad en el momento en que no cuenta con los recursos para ello porque no hay presupuesto suficiente para comprarlo o simplemente porque los trabajadores practican el tan común “robo hormiga” dentro de las Instituciones.

Los mexicanos no estamos preparados para recibir un servicio de Salud gratuito, pues lo que es gratis se desperdicia; no se le da el valor adecuado. La psicología mexicana está encaminada, preparada a conseguir casi todo de manera gratuita, fácil y no educada para conseguir información suficiente, eficiente, verdadera y actualizada para obtener recursos propios y cubrir los gastos necesarios para cualquier momento de su vida.

La deficiente inversión hecha por el país en este sector no le deja ganancias por no ser una actividad productiva, sino un servicio; la salud nunca es gratis como nuestro gobierno lo afirma. Las personas receptoras del servicio de salud son sólo uno de los factores dentro de la atención médica, los trabajadores del Seguro Social, a pesar de que el Contrato Colectivo de Trabajo mencione que deben ser “los más férreos defensores de lo que la Seguridad Social representa como pilar de estabilidad, concordia y desarrollo nacional, instrumento de redistribución de la riqueza nacional y promotor de la justicia social conforme a los nobles e irrenunciables principios de solidaridad, equidad e integridad que le dieron origen”[7] la realidad es que no se preocupan por lo que sucede o por hacer más eficiente su trabajo.

La calidad de los servicios se integra  por la participación conjunta y coordinada de trabajadores y funcionarios que día a día llevan a cabo las tareas conducentes para brindar seguridad a través de los servicios institucionales ¿de qué sirve que esté establecido en el contrato si nadie lo seguirá? El tiempo de espera de una persona en las instituciones correspondientes para su atención médica en la actualidad es deficiente esto se sustenta en que si acudimos a un servicio de urgencias hasta ocho horas (aproximadamente) se recibe la atención médica y si se acude a una consulta programada es prácticamente todo un turno en esperarla, muchas veces sólo se acude por receta para control de una enfermedad crónica.

Las enfermedades crónicas son enfermedades de larga duración y por lo general de progresión lenta. Las enfermedades cardíacas, los infartos, el cáncer, las enfermedades respiratorias y la diabetes, son las principales causas de mortalidad en el mundo, siendo responsables del 63% de las muertes. En 2008, 36 millones de personas murieron de una enfermedad crónica, de las cuales la mitad era de sexo femenino y el 29% era de menos de 60 años de edad.[8]

Si el gobierno desea otorgar salud a sus habitantes haciendo accesibles estos servicios a  un sector que se enfrenta con gastos mayores cuando se presenta alguna enfermedad sin importar el nivel de gravedad que tenga ¿por qué somos el país que invierte menos en este sector y el que más gasta en medicamentos? Un sector de la población pertenece a alguna institución pública de salud, la mayoría de ellos tienen que comprar las medicinas que necesitan con su propio dinero pues es enorme el porcentaje de fármacos importados.

La distribución de medicamentos es un acto lucrativo muy rico, los laboratorios internacionales que comercializan sus productos con México justifican su sabiduría como costo y relación valor-precio entre el bien y el consumidor (no está demás decir que esto es cierto).

México por habitante “gasta” aproximadamente 1,061 dólares destinados a su salud, la universalidad y la equidad que se pretende dar al sector salud es imposible pues la inversión hecha por México, aunque presente, ésta no podrá jamás ser suficiente, enfermarse es demasiado costoso y su presupuesto no lo cubriría.

Diversas circunstancias envueltas en el mismo coctel de factores (embarazos adolescentes, enfermedades crónicas, sobrepeso infantil, diabetes, población vulnerable, los accidentes, la esperanza de vida de la población – la cual es demasiado alta –  etc.) hacen que la salud como parte de la dignidad humana mexicana sea cubierta respecto a las circunstancias del país y si tú país, no tienes dinero para cubrirla por ser un gasto demasiado fuerte, busca la manera de contrarrestar la enfermedad en tus habitantes, reduce el gasto en salud pero otorga a las instituciones buenos trabajadores y cuida que tengan lo indispensable para cubrir las condiciones que se presenten en tus hospitales, pero invierte en tu población, invierte en investigación, invierte en educación.

 

Posdata: “No nos des de comer, enséñanos a buscar nuestros alimentos.”

Angulo Olvera Héctor Daniel.

 

 

 

 

 

 

 

[1] Centro Interamericano de Estudios de Seguridad Social, Seguridad Social Para Todos [En línea] Área ¿Qué es la Seguridad Social? (s.f.) Recuperado el 28 de abril del 2016, de   http://www.seguridadsocialparatodos.org/node/1

[2] International Social Security Associaton [En línea] Área Country Profiles, México. (s.f.) Recuperado el 28 de abril del 2016, de   https://www.issa.int/country-details?countryId=MX&regionId=AME&filtered=false

[3]Ley del Seguro Social, Artículo 5, disponible en http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/pdf/92_121115.pdf

[4]Información general del Sistema Nacional de Protección Social en Salud  (s.f.) Recuperado el día 2 de mayo del 2016, de http://www.salud.gob.mx/transparencia/inform_adicional/InfoGralSP.pdf p.2.

[5]LASTIRI, Xanath, Y ante el desabasto de medicinas ¿a quién compra el gobierno?, Sin embargo periodismo digital sin rigor [en línea]. 2 de diciembre del 2015, [fecha de consulta 8 de mayo del 2016]. Disponible en:     http://www.sinembargo.mx/02-12-2015/1567597

[6] Ley del seguro social, artículo 251 fracción XXXVI, disponible en: http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/pdf/92_121115.pdf

[7] Contrato Colectivo de Trabajo del Instituto Mexicano del Seguro Social, p. 3., disponible en: http://www.sicapacitacion.com/nueva/ccdt.pdf

 

[8] Organización Mundial de la Salud [en línea], área Temas de Salud Enfermedades Crónicas, (s.f.) Recuperado el día 23 de mayo del 2016, de http://www.who.int/topics/chronic_diseases/es/